miércoles, 7 de septiembre de 2011

Tristicity

Hay situaciones que me trasmiten una profunda tristeza: los perros muy flacos que andan sueltos en la calle, esos que apuran el trote y te caminan a la par, meneando un costillar saltón con la esperanza de recibir algo. Sencillamente me matan.

En mi nuevo barrio hay muchísimas remiserías. No sé por qué, pero esas oficinitas oscuras, llenas de almanaques de años anteriores, cortinitas sucias y señoras que fuman mientras atienden el teléfono me generan una angustia parecida a la que producen las reuniones de consorcio en los paliers de los edificios.

1 comentario:

Trapitos al Sol. Indiscreciones de una empleada doméstica dijo...

Y eso que no te subiste al remis. Ni el choffer no te contó todas sus penas y lamentos.