jueves, 31 de julio de 2008

¡Sí a los carriles exclusivos y a la atención terapéutica!


¡Cómo grita esa mina!, dijo refiriéndose a la presidenta, cuya voz sonaba desde la radio (por lo menos no era Ari Paluch). Después me contó que Cristina le recordaba mucho a su hermana, con quien tenía una pésima relación. Dicho esto, agregó: las mataría a las dos. Fratricidio y magnicidio, todo por $ 4,30 la bajada de bandera. Pero no se detuvo ahí. Tengo una amiga que es gato fino y se saluda con la Alfano. Está toda hecha “Grace”, es un gremlin. Están todas retocadas, la Zalazar, la fulanita, la menganita (listado olvidable de vedettes). Yo tendría que ser asesor de gatos, sentenció. ¡A Luli [Zalazar] sabés cómo le hubiese dicho que no se tocara la cara!, no, nena, no, el culo y las tetas, todo bien, pero la carita ¡no! Mientras tanto yo pensaba que si una carrera como asesor felino lo sacara de las calles, yo viajaría más tranquila.

martes, 22 de julio de 2008

Eso que nunca pensé que iba a decir



¡Qué buena está la última película de Batman!

viernes, 18 de julio de 2008

Me preocupan

En algún librito cursi leí algo así como “extraño a alguien que jamás conocí”. En ese momento me produjo arcadas, pero ahora entiendo. Yo siento nostalgia por una época que nunca viví. Un momento en el que las publicidades funcionaban así: pintoresca ilustración de una botella + texto que dice “Ginebra Llave, la mejor”. Hoy están todas llenas de supuestos guiños y gestos cómplices. Me hacen mal. ¿De verdad les parece gracioso lo de la nueva regla ortográfica de Kangoo? ¿Por qué todos los locutores ponen esa voz de “amigo canchero”? Y finalmente, los adjetivos “fresco” y “cómodo” no funcionan bien cuando los aplicamos a “ojos”. “Son las siete de la tarde y mis ojos siguen frescos y cómodos como…”. ¿Qué? Para las Menthoplus, vaya y pase, pero los ojos frescos… es demasiado.

miércoles, 16 de julio de 2008

En setiembre tú fuiste mía...


Me gustan los neologismos, hablan de la vitalidad de la lengua. No me refiero a crímenes deformantes como “setiembre” en vez de “septiembre”. Adoro el “obnubilante” de Vos, de Aristimuño. Funciona bien, es elocuente, no se puede reemplazar por ninguna otra palabra, tuvo que inventar una. Me gustó tanto que le perdono que aparezca escrito con “v”. En cambio me desespera, me violenta, me pone de un humor horrible la palabra “finde”. Me hace casi tanto daño como la canción del Cirque du Soleil o subirme a un taxi y que la radio sintonice “El exprimidor” (¿el imitador no tiene amigos que el digan que mejor no?).

martes, 15 de julio de 2008

Déjeme acá, nomás

Me gustaría saber si los taxistas se vuelven locos a medida que pasan los años o si las empresas de radio taxi sólo contratan a personas dementes. En los 13 años que llevo viviendo en esta ciudad, jamás viajé con uno cuerdo. Casi siempre me bajo asustada o incómoda, prometiéndome nunca más subir a un taxi. Durante el último viaje, el señor me explicó que para no pagar los $ 7 que le cobraba un supermercado por estacionar su auto, gastó $ 50 pesos en jabones; "yo los $ 7 pesos no se los regalo, más vale compro algo útil y estaciono 'gratis'". Mientras me contaba esto, lleno de orgullo, se limpiaba las manos compulsivamente con un trapito húmedo y se acomodaba una impecable cola de caballo. Lo más pertubador: el señor era igualito a Willie Nelson. Hubiese estado más tranquila con Kenny Rogers.

viernes, 11 de julio de 2008

Bailemos

Toda danza tiene una manera particular de ser interpretada. La danza clásica requiere de suavidad, los cuerpos se mueven etéreos como si estuvieran volando. El flamenco, en cambio, tiene una fuerza impresionante, que sale del escenario y se te viene encima. Es muy diferente la manera de poner el cuerpo en una y en otra. Tengo una amiga que baila flamenco y clásico. Cuando baila clásico y queda suspendida en el aire como tirada por un hilo, parece frágil y vulnerable; cuando baila flamenco, mete miedo. Se le transforma la cara, se convierte en una especie de maremoto bailarín. Siempre me impresionó esa capacidad para cambiar de actitud. Supongo que no debe ser fácil. Tampoco debe ser fácil destrozar un género como lo hace Raffaela Carrá en este video de Fiesta, observen como parece que baila flamenco… pero no. Y el crimen lo rematan sus “Susanos” (o “Rafaelos”, en este caso), con sus trajecitos ajustados y sus sombreros con borlas. Me fascinan estas “creaciones”. Le pongo unos volados al vestido, revoleo una manito, grito “ole!” y ¡listo! Lo mismo me pasa con Rodolfo Valentino bailando tango en Los cuatro jinetes del Apocalipsis. Lo más gracioso de todo es que está disfrazado de gaucho y la señorita es una fusión de dama antigua con sevillana. Imperdible. De todas maneras, cumple con su propósito, no hay baile más "macho" que el tango, ni nadie más macho que Valentino.

martes, 8 de julio de 2008

Recomendado para viernes



El diccionario define "carisma" como "Especial capacidad de algunas personas para atraer o fascinar". Cansada de ver cómo se abusa del adjetivo "carismático" en beneficio de conductores gritones de tv, lo voy a tomar prestado para hablar de Tomi Lebrero y su puchero misterioso. Excelente programa para aquellos que tuvieron una semana difícil o que sencillamente se niegan a quedarse a ver tele con la excusa del cansancio. Recomiendo arrastrarse, si es necesario hasta Escalada 332 (Paternal, capital del repuesto automotriz). Tomi retoma el ciclo que que tantas alegrías nos dio en su versión anterior en el Pachamama (cómo olvidar aquella noche con Lisandro A. como invitado). Muy buena energía y canciones geniales de la mano de este teatral cantautor. Mi favorita es Gualeguay, con la que casi siempre cierra; pero seguramente sonarán la hitera Los chicos del cine independiente (banda de sonido de Upa), la pegadiza Pijama Party o Peter, espeluznante retrato de un profesor "mano larga" y canciones nuevas para la próxima película de la gente de Upa. A la delicada voz de Tomi se suma el laburo impecable de la banda. Con todo esto espero haber justificado semejante recomendación, el resto les queda a ustedes. Este viernes tiene a Lucio Mantel como invitado.
Para aquellos que prefieren el teatro sugiero Automáticos en el Teatro del Pueblo. Pilar Gamboa, increíble.

miércoles, 2 de julio de 2008