martes, 15 de julio de 2008

Déjeme acá, nomás

Me gustaría saber si los taxistas se vuelven locos a medida que pasan los años o si las empresas de radio taxi sólo contratan a personas dementes. En los 13 años que llevo viviendo en esta ciudad, jamás viajé con uno cuerdo. Casi siempre me bajo asustada o incómoda, prometiéndome nunca más subir a un taxi. Durante el último viaje, el señor me explicó que para no pagar los $ 7 que le cobraba un supermercado por estacionar su auto, gastó $ 50 pesos en jabones; "yo los $ 7 pesos no se los regalo, más vale compro algo útil y estaciono 'gratis'". Mientras me contaba esto, lleno de orgullo, se limpiaba las manos compulsivamente con un trapito húmedo y se acomodaba una impecable cola de caballo. Lo más pertubador: el señor era igualito a Willie Nelson. Hubiese estado más tranquila con Kenny Rogers.

5 comentarios:

paula dijo...

en vez de hola habría q entrar al taxi diciendo "buen día, locura"

y esos taxistas que manejan tan excelente, tan como si estuvieran jugando al ajedrez, que al final terminan manejando pésimo?

:) beso

Personas en la sala dijo...

Los que manejan como Kasparov son los que se vuelven locos cuando otro conductor no maneja como ellos y aceleran, les pegan el auto, gritan cosas y/o ignoran algún semáforo en pos de su contrincante.

l u c dijo...

... y por qué no un Robert de Niro a lo Taxi Driver, allá por los 70s?

saludoss candee

(ya que no actualizo mi blog, te puedes pasar por mi también poco popular fotolog: /downinthelight)

l u c dijo...

nononononono!
no soy un chico flogger,
lo mío también es arte
en el tonti mundo del fotolog...
jaaa!

Personas en la sala dijo...

Colo, lamento decirte que tener un flog te convierte en flogger, jajajaja.