martes, 22 de junio de 2010

El imperio de la pelota

Una señora gris, oscura, que siempre viste trajecitos opacos trabaja en el mismo lugar que yo por la tarde. No abre la boca para otra cosa que no sea quejarse por el frío sobrenatural que sufren sus huesos, pero ahora está saltando en su silla con la radio en la falda. Una mueca parecida a una sonrisa y la palabrita mágica que se repite en loop: gol, gol, gol. En la calle un nene imita con su voz el sonido de las endemoniadas vuvuzelas. Me enternece el mundial en los demás.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Santy ayer en la puerta de la psicologa que nos tenia que bajar a abrir. GOOOOOOL el pibe lo unico que queria saber era que jugador lo habia hecho. A los gritos "GOL DE QUIENN" "GOL DE QUIENN" pobrecito, nadie le respondia :P

Lillí dijo...

¿Y si lo abrazás un poquito?