viernes, 30 de mayo de 2008

Evidencia empírica

Confirmado. Estar enamorada puede llevarte al límite con la idiotez. Sos capaz de afirmar con mucha seriedad y realmente convencida de que significa algo, cosas como: "Él también odia los sugus de menta". A eso generalmente le sigue un suspiro y la absoluta certeza de que este tipo de coincidencias no pueden ser casuales. El mismo recurso funciona con gustos musicales, artísticos, culinarios, etc.


2 comentarios:

Mercadito de barrio dijo...

definitivamente los sugus de menta no son un parámetro. El amor no lleva a la idiotez sino a la exageración.

Personas en la sala dijo...

La creencia (muchas veces no declarada) de que el otro puede cambiar y ese tipo de ilusiones me hacen sentir más cerca de la idiotez que de la exageración, mi querida lu.